Si hay algo que en este momento nos preocupa a todos es trabajar. Buscar un empleo se ha convertido en la prioridad número uno para los casi seis millones de parados que hay en este momento en España, donde una de cada cuatro personas está en situación de desempleo. Es normal que con estas cifras la preocupación número uno de la mayoría de nosotros sea el tener un trabajo digno. La primera necesidad que tenemos que tener cubierta los seres humanos es, de hecho, la seguridad, según cuenta Maslow en su famosa pirámide. Después viene la autorrealización y todo lo que sigue pero lo primero es la seguridad física, de recursos, de empleo, eso que ahora mismo esta fallando en esta sociedad en la que vivimos.

Desde el coaching no podemos dar trabajo a la gente (ojalá fuera posible) pero sí que podemos ayudaros a los que estáis buscando trabajo a mirar de otra manera ese proceso de búsqueda de empleo, a saliros de la visión que tenéis y a ampliar el marco en el que os estáis moviendo, lo que os permitirá tener más opciones a la hora encontrar un empleo digno.

Lo que nos sucede a menudo cuando nos ponemos a hacer algo, como buscar trabajo, es que nos implicamos tanto que sólo vemos lo que tenemos delante. Es el síndrome del burro con orejeras, que sólo ve el camino que le queda por recorrer pero no lo que hay a ambos lados. Cuando nos ponemos a hacer algo sólo vemos eso, sin observar los matices, cuando lo sano puede ser da un paso a un lado y observar el camino desde fuera. Ahí, te lo aseguro, surgen nuevas ideas y nuevas perspectivas.

Eso es lo que podemos aportar desde el coaching. Te recuerdo que el coaching no es una orientación laboral. En ningún momento un coach dice a su cliente qué hacer, simplemente le plantea preguntas y le reta para que veas la realidad desde el punto de vista que le pueda ser más favorable, más productivo y lo acerque más hacia su objetivo.

¿Qué preguntas poderosas y qué reflexiones podemos plantear dese el coaching para las personas que estáis buscando empleo, que os ayuden os motiven y os lleven a conseguir eso que queréis? Éstas son algunas:

  • La primera es el título de este artículo. Por muy desesperado que estés, por muy desilusionado, por muchos curriculums que lleves echado plantéate siempre “¿qué más puedo hacer para encontrar trabajo?”.  Aquí hace falta una dosis fuerte de honestidad. Nos suele pasar que cuando acometemos un proyecto, ya sea encontrar trabajo, emprender o cualquier otro parecido, tenemos la sensación de que estamos rindiendo al 100%. Sin embargo, si eres honesto la mayoría de la veces te darás cuenta de que siempre se puede hacer algo más. Sé bien de lo que hablo. Yo llevo un año y un mes con el proyecto de Viventi y hay épocas en las que tenemos la sensación de que estamos haciendo todo lo que podemos hacer para sacar adelante nuestra idea. Sin embargo, si nos paramos y reflexionamos unos minutos nos damos cuenta de que podemos hacer mucho más de lo que estamos haciendo. Siempre hay más opciones, más teclas que pulsar, más palos que tocar.
  • Mírate desde fuera. Plantéate por un momento que eres un orientador laboral que está hablando contigo mismo. ¿Qué consejos te darías? ¿Qué opciones te plantearías? ¿Qué más de lo que estás haciendo podrías hacer? Aunque te pueda parecer una chorrada, una manera de hacerlo que te puede ayudar a tener muchas respuestas es escenificarlo. Imagínate que estás hablando con ese orientador laboral: ¿Qué dirías tú? Después ponte en la posición que, imaginariamente, ocupa esa persona, es decir, en frente de ti, y háblate desde ahí. Por último, ocupa la posición de un observador imaginario de la conversación y déjale también que hable. ¿De qué se ha dado cuenta ese observador? Este ejercicio nos ayuda a salir del yo y nos lleva a ver nuestra situación desde otros puntos de vista.
  • Ten claro que tu objetivo es encontrar un trabajo, no buscarlo.  La Programación Neurolingüística nos habla sobre cómo usar el lenguaje para que sea lo más eficaz posible y nos dé un empujón a la hora de conseguir un objetivo. Si centramos nuestros esfuerzos en buscar trabajo estaremos centrándolos ahí, en la búsqueda. Sin embargo si lo que queremos es tener un trabajo, encontrarlo, trabajar en definitiva, el objetivo está planteado de una manera más concreta, más detallada, más real. Este punto consiste simplemente en tomar conciencia de cómo nos hablamos a nosotros mismos, cuál es nuestro diálogo interno, donde ponemos los esfuerzos. Si estás en búsqueda activa de empleo pues ya tienes claro cuál es tu objetivo, buscar empleo. Sin embargo, si tu objetivo es trabajar donde pones el foco es ya en el siguiente paso.
  • Cuenta cuál es tu objetivo y comunica a las personas que te rodean tu necesidad de trabajar. Lo de pedir y mostrarnos carentes se nos da mal. Eso de decir “necesito trabajar” o “necesito ganar dinero” puede ser un trago duro. Sin embargo, es la única manera de que la gente que te rodea sepa en qué momento estás y qué es lo que andas buscando. Vivimos en una sociedad en la que mola mostrarse abundante, tenerlo todo,  sin embargo el primer paso para encontrar trabajo es comunicar a la gente que te rodea que lo necesitas. Si no, ¿cómo lo van a saber? Ahora mismo estamos interconectados con Facebook, Twitter y todas las redes sociales en las que estamos inscritos. ¿Estás aprovechando los cientos de contactos que con casi toda seguridad tienes para encontrar empleo? No sé si conoces la teoría de los seis grados de separación. Si sabes de qué va también sabrás que tirando de un conocido puedes ponerte en contacto con cualquier persona del planeta. Y digo yo, ¿en todo el mundo habrá un empleo para ti? Como ejemplo te dejo este enlace a la historia de Enzo Vicaíno, un periodista que se puso a cantar su curriculum en el metro, lo colgó en Youtube y encontró empleo. Precisamente, ese vídeo es el que encabeza este artículo.
  • Destierra creencias limitantes como “ahora es imposible encontrar trabajo”. En los talleres que hacemos de coaching para emprendedores es una de las ideas que más a menudo suele aparecer. Siempre hay alguien que dice que ahora mismo, tal y como está la cosa, es imposible encontrar trabajo. ¿Conoces a alguien que en el último año haya encontrado trabajo? Seguro que sí. ¿Por qué no vas a ser tú la siguiente persona que encuentre trabajo?

Estas son sólo algunas ideas. Si tú tienes más que pones en práctica para encontrar ese trabajo deseado y que te funcione, nos encantaría que la compartieras con nosotros. Ahora, volviendo a leer el artículo antes de publicarlo, me doy cuenta de que quizás falta el punto más importante que es el no perder la esperanza. Para eso quizás lo mejor sea rodearse de seres queridos que te ayuden, te empujen y te recuerden que ese trabajo acabará llegando.