Ya sabes qué es lo tuyo. Cuál es tu vocación y qué es lo que quieres hacer en la vida. Pero te gusta tanto que cada vez que alguien te pregunta cuánto cobras por hacer eso sientes un rubor recorrer tu cara y eres incapaz de precisar un precio. Cuentas que estás empezando y sabes que, al fin y al cabo, lo harías gratis porque lo que deseas más que nada es poner en práctica eso que has aprendido. Lo cierto es que en el fondo sientes vergüenza por cobrar, por poner un precio a tu trabajo y hay una voz interna que te dice: ‘¿Pero cómo voy a cobrar por trabajar en lo que me gusta?’.

Si este es tu caso no pienses que lo tuyo es especial y que eres un desastre porque no sabes cómo cobrar por trabajar en lo que te gusta. Ni mucho menos. Esta creencia es muy habitual entre las personas que quieren dedicarse a vivir del mundo de la terapia, del coaching, de la ayuda y de personas que están en proceso de reinvención profesional y quieren convertir en su profesión algo que antes ha sido una afición.

Pensar que no mereces cobrar por trabajar en lo que te gusta es muy habitual entre personas que quieren dedicarse al coaching, a la terapia o al mundo de la ayuda

El otro día, en una charla de coaching wingwave que di para emprendedores, salió a la luz esta creencia y la mayoría de los asistentes la había padecido alguna que otra vez y contaban que no sabían cómo cobrar por trabaja en lo que les gusta. También suele salir a menudo en mis clientes de coaching y en las personas que asisten al programa de mentoring para coaches y terapeutas que hacemos en Viventi. De hecho, he de decir que las creencias relacionadas con el dinero son las que están más arraigadas y en muchas ocasiones ni siquiera son nuestras: son de nuestra familia que nos las ha transmitido en modo de herencia inconsciente.

Estrategias para no cobrar lo que te mereces

Y, he de decirte, que yo también la he padecido. Cuando empecé a hacer las sesiones de coaching que me pedían para certificarme me sentía incapaz de cobrar por trabajar en lo que me gusta. Mi estrategia en ese momento fue  hacer intercambios: yo hacía sesiones de coaching a cambio de lo que me pudiera dar esa persona, pero he de decir que la mayoría de estas sesiones nos las cobré. Después, cuando ya monté Viventi y empecé a dedicarme al coaching de manera profesional, seguía habiendo algo que me impedía cobrar lo que me merecía.

Cada uno tenemos una estrategia para no cobrar lo que nos merecemos. Desactivarla nos lleva al siguiente nivel.

Sí que me resultaba cómodo cobrar los cursos que dábamos en empresas en instituciones, pero no las sesiones de coaching. Las empresas y las instituciones tenían un presupuesto para eso, pero ¿y la persona que lo necesita y no tiene los recursos para abonarlo? Había algo dentro de mí que me decía que ese trabajo me gustaba demasiado como para cobrar por ello, que al fin y al cabo lo haría gratis y que era excesivo cobrar ese dinero por una hora de trabajo. Por ese motivo, al principio ponía las sesiones de una hora y media. Algo dentro de mí decía que si dedicaba más tiempo, el cobrar eso sí que podía estar justificado. Lo único que había detrás era mi inseguridad y una creencia que, al menos a mí, me estaba jodiendo la vida: esa creencia era que para ganar dinero tenía que esforzarme mucho y si hacía algo que me gustaba tanto, ahí no había esfuerzo ni había nada.

Cómo cobrar por trabajar en lo que me gusta

¿Cómo desactivé esa creencia que era mía y que me había zampado yo desde pequeñita? Con coaching wingwave. En la formación que yo hice para certificarme como coach wingwave(si no sabes lo que es ni como funciona, puedes ver este vídeo) fue uno de los trabajos personales que hice y en ese trabajo me di cuenta de que esa creencia no era mía. Era de mi familia, tanto de la paterna como de la materna. Por ambas ramas se habían dedicado siempre a hacer trabajos manuales, duros, relacionados con el campo, con la construcción, en que se usaban las manos y el dinero se ganaba con el sudor de la frente, nada de con trabajos mentales y en los que estás sentada en un sillón.

Al hacer este trabajo tuve cierta paz con el dinero y, curiosamente, empezó a fluir. Las sesiones de coaching comenzaron a crecer y ya no me suponía un problema cobrar lo que cobraba por hacerlas. Incluso subí el precio porque me di cuenta de que me merecía cobrar más de lo que estaba cobrando. Y en lugar de tener menos clientes, comencé a tener más. Paradojas de la vida.

¿Tú también crees que no puedes cobrar por trabajar en lo que te gusta? ¿Sientes que hay algo que te bloquea y que te impide desarrollarte de forma profesional por este camino? Puedes hacerte estas preguntas para desbloquear esta creencia y empezar a cobrar por trabajar en lo que te gusta. Te sugiero que cojas un papel y un bolígrafo y vayas contestándolas a medida que las ideas te van viniendo a la cabeza, sin pensártelo demasiado.

1. ¿Qué me impide cobrar por trabajar en lo que me gusta?

Quizás pienses que la gente no tiene tanto dinero com para pagarte, que tu trabajo no vale tanto, que cobrando eso no vas a tener clientes… La lista puede ser infinita. Piensa que detrás de esa lista están tus miedos y tus inseguridades. Para contrarrestarlos anota cuánto has pagado tú por trabajos de este tipo, por hacer tus sesiones de coaching o de terapia o por ir a un fisioterapeuta o a alguien que te dé un servicio. ¿Lo has pagado a gusto? ¿Por qué la gente que va a sesión contigo no lo va a pagar también a gusto?

2. ¿Cuáles son mis creencias relativas al dinero?

Sí, examina qué crees acerca del dinero. Puedes pensar que el dinero terminará acabándose, lo que implica pensar en él en términos de escasez y si piensas que es escaso, ¿cómo va a haber gente que pueda pagarte por hacer lo que haces? O quizás pienses que tú no te merezcas ganarlo o no tengas permiso para recibirlo haciendo lo que te gusta. Con mis clientes suelo testar estas creencias para tratarlas con coaching wingwave y trabajamos aquellas que les restan fuerza para transformarlas en creencias posibilitadoras. En casa, puedes hacerlo examinando esa lista de creencias y preguntándote qué creencia te vendría bien para desactivar esa que te está fastidiando la vida. Anótala en otro papel y rememora momentos de tu vida en los que esa creencia haya sido cierta. Te ayudará a darte cuenta de que la realidad es ni más ni menos que aquella que te cuentas.

3. ¿Cuáles son las creencias de mi familia de origen relativas al dinero?

Aquí entramos en terreno duro. Lo sistémico y relativo a la familia de origen suele tener un peso muy importante en lo relativo al dinero. En las sesiones que he hecho este tipo de trabajo con mis clientes para ver qué bloqueo hay con el dinero o el trabajo es habitual que salgan lealtades a abuelos, padres o cualquier otro miembro de la familia para el que ganar dinero o tener un trabajo estable ha sido una asignatura pendiente. ¿Cómo trabajarlo en casa? Pues hazte una especie de árbol genealógico en el que representes a los miembros de tu familia de origen y representes cuál ha sido su relación con el dinero o con el trabajo o con ambos. ¿Estás repitiendo algún patrón? ¿Cómo podrías evitar repetirlo?

4. ¿Qué pensarán de mí si cobro por ayudar a alguien?

Haciéndote esta pregunta verás los miedos que sobre tu identidad pueden surgir. Igual tu creencia es que van a pensar que eres un usurero o que sólo las personas que son malas cobran por ayudar. Es habitual que asociemos la ayuda a algo gratuito y que pensemos que ayudar tiene que ser altruista. Sin embargo, ¿por qué un abogado puede cobrar y no un terapeuta, un coach o alguien que se dedique a asesorar a emprendedores?

5. ¿Cuánto dinero llevo invertido en formaciones para trabajar de esto que estoy trabajando? ¿Cuántas horas de mi vida llevo invertidas en ello?

Estos números te va a permitir ver cuánto esfuerzo y dinero le has dedicado para poder llegar al punto al que estás y para ver que, en efecto, te mereces cobrar por trabajar en lo que te gusta. ¿Si hay gente que ya lo está haciendo, por qué no lo vas a hacer tú?

¿Cuáles son tus bloqueos? ¿Qué te impide cobrar por trabajar en lo que te gusta? ¿De qué manera los has resuelto tú y has podido comenzar a cobrar por ello? Espero tus comentarios.