Yo no fui una niña que jugara con Lego. Para nada. Así que cuando David y Teresa, de Sertuser, nos propusieron hacer en Viventi un taller para vivir en nuestras propias carnes el método Lego Serious Play y para enseñarnos algunas herramientas para aplicar con nuestros pacientes y clientes,  lo primero que me asaltó fue cierto escepticismo.

¿El juego con esas figuritas iba a enseñarme algo sobre mí después de tantos cursos hechos para conocerme, trabajarme y con tantos maestros? La humildad no es una de mis virtudes, en efecto, así que lo primero que me enseñaron estas figuritas fue a ser mucho más humilde porque sí que me enseñaron cosas sobre mí: muchísimas. ¡Malditas figuritas de Lego! Nada más llegar al taller al que vinieron otras coachs, terapeutas y personas que querían conocerse un poco mejor comprendí que si en las dichosas clases de Plástica (sí, yo también fui a EGB) en lugar de tener que pintar y hacer collage, hubiera tenido que construir con Lego, otro gallo me habría cantado. La primera en la frente.

darth-vader-lego

Cuando comienzas a construir con Lego, te familiarizas con las fichas, entras en lo que se denomina un estado de ‘flow’ donde no existe el tiempo ni el espacio, similar al de los creadores y los deportistas cuando están enchufados haciendo eso que les apasiona. Yo entré en ese estado muy pronto, así que el fin de semana que duró el taller que hicieron David y Teresa en Viventi en noviembre se convirtió en una especie de agujero espacio-temporal en el que sólo quería construir. De hecho, estuve varios días con bastante mono de volver a crear con Lego y los Reyes Magos de este año han sido magnánimos al regalarme un par de cajas.

El trabajo que hicimos estuvo centrado en conocernos y explorarnos a través de las técnicas del método Lego Serious Play. Yo ya había hecho algunos de los ejercicios que hicimos durante la formación en coaching y durante otros cursos, pero hacerlos con Lego cambió por completo el resultado: lo normal es que cuando haces un trabajo de ese tipo trabajes desde la palabra. Si, por ejemplo, trabajas sobre tu carácter lo normal es que te definas mediante palabras.

Sin embargo, al trabajar con los Lego deja de tener importancia la palabra y es tu subconsciente el que habla. No hay filtro, no hay represión, simplemente construyes para crear algo. Cuando construyes, al menos a mí así me pasó, sólo te concentras en poner una pieza, otra, no sabes muchas veces para qué, pero el resultado es impresionante. Para mí fue un chutazo hacer la ventana de Johari con estas figuritas. Este trabajo se realiza para tomar conciencia de aquello que tú conoces sobre ti mismo e intentar vislumbrar lo que desconoces. La había hecho antes, por supuesto, pero hacerla con los Lego cambió la concepción que tenía sobre mí misma y me aportó mucha luz sobre esa área desconocida, que ni yo ni los demás conocen.

¿Que cómo es mi área desconocida? Así:

ventana-Johari-Lego-Viventi

No sabía yo que hubiera tanta negrura dentro de mí, tantos tentáculos que se extienden y que van en todas direcciones. Desde noviembre, llevo esta figura grabada a fuego dentro de mí como símbolo de eso que rechazo pero que está ahí, como mi Heisenberg interior. ¡Malditas figuritas de nuevo!

Mi área oculta fue, podríamos llamarla, más delicada. Y me mostró cómo cuando voy por la vida con más calma, observando los detalles, lo pequeño, se abre bajo mis propios pies un mundo enorme y muy rico al que en el día a día no suelo prestar atención y que, por lo tanto, me suelo perder. Ese mundo es éste:

area-oculta-lego-viventi

Además de para mí como persona, hacer este taller me sirvió para incorporar los Lego como herramienta al trabajo con mis clientes de coaching, sobre todo para aquellos que tienen algún tipo de bloqueo o a los que le viene bien salir de la cabeza para ver su situación desde otra perspectiva, además de para realizar planes de acción. Hace ya meses que uso en las sesiones esta herramienta y los resultados están siendo muy positivos: a través de este trabajo se puede ver y trabajar en una sesión lo que en condiciones normales llevaría varias.

Así que estoy muy feliz porque David y Teresa vuelven el 1 y el 2 de mayo a Viventi a hacer este taller y volver a vivir el método Lego Serious Play. Todos los detalles sobre el mismo están este enlace. Sólo espero que sean buenos conmigo y me dejen repetirlo. Prometo no volver a maldecir a los Lego ni subestimar su poder.